Con la participación de 25 equipos – 19 de varones y 6 de mujeres- , el fin de semana del 3 y 4 de septiembre  se jugó la primera fecha de la Liga Universitaria de Tenis, organizada por la FeDUA y la Asociación Argentina de Tenis (AAT), en El Clú de Buenos Aires.

La liga se disputa con una metodología novedosa: Dos singles por equipos y desempate con un tercer punto de dobles. “Fue un hecho histórico, la primera vez que se realizó este formato en el país y creemos que fue un éxito”, cuenta Agustín Vampa, uno de los coordinadores de la Liga, junto a Luciano Spiazzi y el Prof. Marcelo Albamonte, quien encabeza el equipo.

Albamonte destacó la “gran participación y comportamiento de los jugadores. Vinieron todos los que se inscribieron, algo inédito en el deporte universitario. Esto nos da la pauta de que el sistema está muy bueno, por eso creemos que tuvo mayor repercusión que la que esperábamos”.

Tanto Agustín Vampa como Marcelo Albamonte coinciden en que esta primera fecha fue una prueba para ajustar detalles, corregir posibles errores y sumar mejoras para próximas instancias. Este año se jugarán otras dos fechas de la Liga Universitaria de Tenis -la próxima será en La Plata-, pero el objetivo es que el próximo año sea el del despegue, con una liga permanente y cien por ciento federal, con competencias en cada región del país y la posibilidad de cerrar el año con un Master que defina al Campeón Nacional entre los ganadores de cada región.

Entre las Universiadas y la Coordinación

Además de ser uno de los coordinadores de la Liga Universitaria de Tenis, Agustín Vampa estudia en la UNLP y es también un tenista universitario activo. El año pasado representó a la Argentina en las Universiadas de Gwangju  y tiene ganas de competir el año próximo en Taipei. Su testimonio es ejemplo del crecimiento que viene teniendo el deporte universitario en nuestro país:

“Estos últimos dos años, en la Universidad, se empezaron a hacer mejor las cosas en el tenis y en todo el deporte universitario, siempre gracias a buenas políticas y una buena gestión, con Marcelo Albamonte en tenis  y Javier Orlandoni como Director de Deportes de la Universidad.

Gracias a ellos estoy aprendiendo demasiado y me encanta, me enseñan a tener otra mirada  y me motivan a seguir haciendo cosas nuevas para el deporte universitario. Me gustan mucho estas dos facetas, la de jugador y la de organizador.  Todavía estoy entre los dos bandos. Aspiro poder jugar en el año que viene en las Universiadas de Taipei, así que me mantengo dentro de la cancha sin dejar de trabajar en la coordinación de las ligas”.

Artículos Relacionados