Desde la FeDUA nos la pasamos hablando de las Universiadas de Verano e Invierno organizadas por la FISU. Decimos que es un evento deportivo impresionante y que no se puede tomar dimensión de su magnitud. Claro, acá en Argentina todavía no se conoce mucho pero hace unos días Sportcal, uno de los sitios mas importantes de Mangment Deportivo a nivel global, publicó un informe hecho por GSI Sports Events en el que estudiaron los 80 Eventos Deportivos más importantes del mundo. Las Universiadas de Verano Taipei ocuparon el segundo lugar luego del Mundial de Atletismo e la IAFF en Londres y las Universiadas de Invierno de Almaty, el puesto 12. El estudio otorga puntajes de acuerdo a los espectadores, los televidentes, el movimiento en redes sociales y el impacto económico de cada evento y -enfatizo- entre todos los eventos deportivos del mundo, la Universiada de verano de Taipei fue el segundo más importante del año y la de Invierno en Almaty, se ubica en el puesto 12. De yapa, en ambos eventos estuvimos nosotros; en los dos flameó la bandera celeste y blanca.
Este año la FISU organiza 34 Mundiales Universitarios; sí, treinta y cuatro campeonato mundiales en 34 ciudades distintas y desde FeDUA nos pusimos como objetivo que Argentina diga presente en 10. Claro, en términos de deseo, quisiéramos ir a todos, pero para ninguno recibimos apoyo. Si Argentina participa es puro esfuerzo principalmente del estudiante deportista, de su familia, de su entrenador, de su Universidad y del empuje de FeDUA y -en algunos casos- de la Federación de esa disciplina deportiva.
A partir de este año nace un nuevo desafío: los Juegos Universitarios Panamericanos #FISUAmericaGames, una deuda pendiente para nuestro continente y una gran oportunidad para seguir fortaleciendo el Desarrollo del deporte Universitario en la región.
Hace tan solo dos años, Argentina fue sede de los Juegos Universitarios Sudamericanos en Miramar, luego de 10 años sin organizarse tan importante evento. Esta recuperación de los JUS se logró gracias al empuje de la FeDUA, su equipo y sus Universidades socias y también al esfuerzo de los países que integran COSUD (Confederación Sudamericana Universitaria de Deportes). Lo importante de esto es que se pudieron hacer y que Argentina pudo organizar, por primera vez, un evento internacional en materia de deporte universitario. Gracias la apuesta de los estudiantes deportistas de todo el país, a su compromiso, Argentina tuvo una gran delegación, y salió primera en el medallero: en ese momento -como ahora- no recibimos ningún tipo de financiamiento.
Los Juegos Universitarios Panamericanos en San Pablo están muy cerca y nosotros soñamos con ir con una gran delegación. Claro, la falta de financiamiento impide tener una buena planificación como se tuvo en Taipei 2017 e imposibilita la continuidad de un proceso de crecimiento y afianzamiento en relación a que muchos estudiantes deportistas no podrán participar por una cuestión netamente económica. Pero no por eso desistiremos de buscar que Argentina vaya con una delegación completa y lo mejor confeccionada posible. No es una improvisación, es un plan B que siempre barajamos, por dos motivos: el primero es que FeDUA nace para garantizar el Derecho al Deporte Universitario, esto incluye la representación en competencias internacionales, entonces el primer objetivo es participar, si es condiciones ideales perfecto, vamos con plan A y si es como ahora, sin apoyo económico, con plan B. El segundo motivo, es que sabemos dónde estamos parados, tenemos apenas 5 años de funcionamiento, logramos mucho y creemos que todavía tenemos mucho por mostrar y mucho por ganar en el terreno de sistematizar los apoyos económicos; pero hasta lograrlo, no estamos dispuestos a quedarnos cruzados de brazos y decir que no pudimos ir, solo diremos que no pudimos ir, luego de agotar todas las instancias y de ofrecerle a cada estudiante deportista la posibilidad de representar a su país.
“Si no creces hacia algún lado, no vas a ningún lado”, leí, el otro día, en un una campaña de comunicación de los All Blacks. Los logros llegan cuando los buscas y para lograrlos hay que salir de la comodidad. Lógicamente no nos gusta decirle a alguien que para viajar se lo tiene que pagar; definitivamente no es lo que queremos, pero nosotros sabemos que la experiencia que va a vivir el estudiante en los Juegos Universitarios Panamericanos no se la va a olvidar jamás; que las posibilidades que hay de transpirar la camiseta argentina son pocas.
Todo este esfuerzo, el de nuestras familias, el de las universidades, lo hacemos también porque somos la primera generación de estudiantes deportistas y dirigentes del Deporte Universitario Argentino; porque somos los fundadores de algo que va a siendo cada vez más grande y que va a dejar como legado principal algo muy importante para las próximas generaciones: demostrar que se puede estudiar y hacer deporte al mismo tiempo y que podemos llevar a la argentina a un escalón más arriba de donde estamos.
Por eso, tanto en los Juegos Universitarios Panamericanos como en los Mundiales Universitarios, además de representar a nuestro país en una competencia, cada estudiante-deportista, entrenador y delegado representa el puente hacia un nuevo modelo de lo que queremos para la sociedad argentina.
Prof. Emiliano Ojea
Presidente
FeDUA