Nacido en Bahía Blanca, jugador profesional de Básquet que formó parte de las delegaciones de FeDUA en Taipei 2017, San Pablo 2018, Tunja y Napoli 2019, terminó sus estudios universitarios en la Siglo21 recibiéndose de Licenciado en Marketing, el mismo día que disputó un partido de la Liga Argentina, les presentamos a Rodrigo Gerhardt.
Reconocido por sus esfuerzos y logros, en los primeros Juegos Universitarios Panamericanos en 2018, fue elegido por votación abierta como abanderado de nuestro país. Además, representó a la selección nacional en los Juegos Olímpicos de la Juventud 2014 y jugó el Mundial U19 en 2015.
“La oportunidad que me dio FeDUA, de ser abanderado de la delegación, fue algo que nunca hubiera imaginado. Vestir los colores de Argentina son el orgullo más grande, pero también eso me permitió conocer distintos países, personas y tener experiencias impresionantes. Hoy conservo muchas amistades y conocidos”, expresó.
Desde muy chico, su vida estuvo ligada al básquet. A los 4 años comenzó a jugar en Bahiense del Norte, y es hasta el día de hoy que sigue combinando su carrera deportiva con la académica. Muy agradecido, comentó: “Como resumen, puedo decir que siento orgullo y gratitud por haber llegado, vivido y formar parte hoy, de la familia FeDUA”.
¿Por qué Marketing? En primer lugar Rodrigo necesitó encontrar una universidad y una carrera que se pudiera estudiar a distancia por su compromiso constante con los viajes y las competencias, y de esta forma, podría hacer las dos cosas al mismo tiempo. “El deporte creo que me dio el entender la carrera como un proceso para lograr más adelante en el tiempo un objetivo mayor. Como deportistas entendemos el trabajo no como un esfuerzo si no como parte de un proceso gratificante y que aprendemos a disfrutarlo día a día”, agregó.
Sin dudas, la combinación entre ambas carreras, lo potenció y le permitió formarse de manera integral, superándose y alcanzando logros que quizá ni él se imaginaba. Hoy en día, Rodri es un ejemplo para muchxs jóvenes estudiantes deportistas, no solo por lo conseguido, si no también por lo vivido. A ellxs les diría: “No lo tienen que pensar como una obligación dentro de su tiempo. Es importante que puedan entender que pueden avanzar sin prisas. Que se permitan vivir la experiencia, no sólo como una forma de incorporar conocimiento o de buscar un futuro empleo. Les garantizo que estudiar te expande la cabeza, te flexibiliza y te permite tener una visión más amplia en cualquier aspecto de la vida. Y por último, y que me lo han repetido mucho en las felicitaciones: Sí, se puede!”.