La relación de Luciano Pailhe con el futsal empezó cuando era muy chiquito: arrancó en Pinocho, pasó a Kimberley y llegó a la primera de Sportivo Barracas, siempre como arquero. Luego se alejó un año para concentrarse en el estudio, aunque no del todo, porque comenzó a trabajar como entrenador de arqueros en un club de Villa Lynch. Luciano tiene 22 años, cursa el último tramo del Profesorado de Educación Física en el Instituto Superior Romero Brest y desde este año integra el seleccionado argentino de futsal universitario que fue campeón en los Juegos Universitarios Sudamericanos y que compitió en el mundial de la misma disciplina disputado en Brasil.
“Lo que vivimos en el mundial no lo voy a olvidar nunca en la vida, el nivel era muy alto y nos trataron como jugadores profesionales, volví muy entusiasmado y pensando que todos deberían vivir una experiencia como esta”, cuenta. Por eso se puso a trabajar para que el Romero tuviera su equipo de futsal: armó un proyecto, lo presentó a las autoridades -que se lo aceptaron- y convocó a una primera prueba de jugadores. “Se presentaron casi 30 estudiantes y ahora tenemos que armar el equipo para participar de la Liga Universitaria de Futsal”, explica. La Liga, organizada por FeDUA y la UNPAZ, comenzará el próximo 17 de septiembre en el microestadio de Hurlingham.
“No conocía mucho del deporte universitario, más que por los JUAR, y me parece que es una buena posibilidad para los estudiantes del Romero de, por un lado, poder participar y, por otro, apoyar la creación de la Liga que, sin duda, será la base para enriquecer a la selección”.
Mientras tanto, Luciano coordina sus estudios con los entrenamientos del flamante equipo que dirige en el Romero y los del seleccionado universitario que, bajo la tutela de Nicolás Rossi, se prepara duro en la UNLaM para los próximos compromisos: los Juegos Universitarios Sudamericanos en Colombia, las Universiadas de Taipei y el Mundial 2018 en Kazajistán.