Es de Córdoba capital. Estudia educación física en la Universidad Provincial de Córdoba (UPC) y compite para el Club Municipalidad de Córdoba.  Jugó en Italia y en su vuelta a Argentina empezó a realizar la doble carrera. Ganó medalla de PLATA en los Juegos Universitarios Panamericanos San Pablo 2018 y este año viajará a Napoli 2019.

Conozcamos a Nicolás Robins

-¿Cómo llegaste al deporte universitario?

– Empecé a jugar a los 11 años en el Club Municipalidad de Córdoba, mi segunda casa. Hoy con 22 sigo jugando ahí. Tuve muchas idas y vueltas con el vóley. Durante el último año de secundaria trabajé y junté plata para irme de viaje. Probé suerte en un club de Italia entrenando en las inferiores. Cuando volví, mi familia quería que estudie ingeniería pero yo quise dedicarme plenamente al deporte. Vivimos un año a puras tensiones y finalmente empecé el profesorado de educación física. No estaba seguro, sin embargo me encontré con la carrera de mi vida. Tuve la suerte de jugar de refuerzo en la Liga Argentina A2 para el club Rivadavia de Villa María. Ahí estuve 2 años y crecí mucho como jugador y persona. Empecé a entender qué era esto de dedicarse al alto rendimiento y a hacer lo que llamamos la doble carrera. Me acuerdo de ese primer verano de liga haciendo malabares para poder hacer el cursillo de ingreso, licencias deportivas, idas y vueltas de Córdoba a Villa María, permisos para faltar a entrenar. En el segundo año de carrera, un amigo me comentó que había una prueba abierta para los Panamericanos en San Pablo. Dudé, pero mis viejos me bancaron y fui. Al final terminé quedando en el equipo y jugando todo el torneo de titular. Llegamos a una final. Fue un sueño.

-¿Qué sentís al representar a Argentina internacionalmente?

-Principalmente siento mucho orgullo. Creo que todavía no soy consciente de lo que me está pasando. También creo que tengo la responsabilidad de dar el máximo, primero para tratar de poner a mi país lo más alto posible y segundo para ser otro ejemplo entre todos los que formamos parte de FeDUA (Federación del Deporte Universitario Argentino). Queiro poder demostrar que es posible estudiar y desarrollarse en una carrera deportiva haciendo la doble carrera. Para que más chicos apuesten por este gran proyecto.

-¿Qué opinás del deporte Universitario?

-Mi opinión como deportista y  futuro docente es que el deporte universitario es una de las mejores oportunidades que se le puede ofrecer a una persona  que está en la encrucijada de  practicar un deporte o dedicarse a estudiar. Hoy, puedo competir a un gran nivel y tener mi carrera al día. Hay una realidad que veo, que miles de chicas y chicos vienen a estudiar una carrera universitaria a Córdoba y junto con eso abandonan el deporte por problemas de horarios,  dedicándose únicamente al estudio. En ese momento abandonan eso que les apasiona más que nada en el mundo. Hay algo de lo que estoy convencido y es que en este mundo necesitamos gente que se apasione por lo que hace. Creo que el deporte universitario es perfecto para los que aman el deporte. En especial para los que se dedican a deportes no profesionales

Nicolás quiere ser un ejemplo. Y sin darse cuenta, ya lo es. Es uno de los tantos jóvenes que desarrollan la doble carrera en Argentina, con apoyo de la Universidad Provincial de Córdoba y la FeDUA. En off nos cuenta que quiere que su historia sirva para aquellxs que dudan entre estudiar o dedicarse al deporte: “A esas personas les deseo que se la jueguen por las dos, porque pase lo que pase, al final se llevan la mochila llena de aprendizajes, crecimiento, amistades y buenos momentos”.